El argumento de la película gira entorno al juicio por asesinato involuntario del agente de bolsa Sherman McCoy (Tom Hanks), que ve como su vida se desploma por momentos. A la entrada en los juzgados, McCoy se ve acosado por una nube de periodistas, entre los cuales encontramos a este extra que lleva una Nikon FM2 acoplada al motor MD-12. Sin embargo, observen que la cámara lleva acoplado un flash Sunpak (tan extendido en USA como los Metz en Europa) de aficionado, que nunca llevaría un fotógrafo de prensa.

La película es muy entretenida, y está co-protagonizada por Melanie Griffith y Bruce Willis. En esta ocasión Willis no pega tiros, pero mantiene su habitual papel de amargado incomprendido.